CorSalud 2013 Ene-Mar;5(1):93-100



ARTÍCULO ORIGINAL

TRADUCCIÓN DE ACRÓNIMOS Y SIGLAS EN TEXTOS MÉDICOS DE CARDIOLOGÍA


Lic. Beatriz Betancourt Ynfiestaa, Lic. Lorena Treto Suáreza, Dra. Ana V. Fernández Perazab
______________

  1. Departamento de Lenguas Extranjeras. Universidad Central "Marta Abreu" de Las Villas. Villa Clara, Cuba.

  2. Departamento de Lengua Inglesa. Universidad Central "Marta Abreu" de Las Villas. Villa Clara, Cuba.


Correspondencia: AV. Fernández Peraza. Universidad Central "Marta Abreu" de Las Villas. Carretera de Camajuaní km 8. Santa Clara, Villa Clara, Cuba . Correo electrónico: anav@uclv.edu.cu



Resumen

Introducción y objetivos: Con frecuencia en los textos médicos se utilizan acrónimos y siglas. Su traducción no solamente constituye un problema lingüístico, sino también cultural. El objetivo fue analizar los problemas asociados a la traducción del inglés al español de acrónimos y siglas usados en textos médicos de Cardiología. Método: Se trata de un estudio sincrónico, descriptivo, interpretativo y cualitativo que se basa en el análisis léxico de acrónimos y siglas tanto en la lengua de partida (inglés) como en la de llegada (español), dentro del marco de los estudios descriptivos de la traducción. Se utilizó una muestra textual empírica compuesta por 8 artículos médicos sobre Cardiología y los textos traducidos correspondientes. Resultados: En el corpus se identificaron 83 acrónimos y siglas, del total, solo 15 fueron identificados como acrónimos. Al analizar el total de casos identificados de siglas y acrónimos, se pudo determinar que, en la mayoría de los casos, se dieron soluciones satisfactorias a los problemas de traducción impuestos por el uso de siglas y acrónimos en los textos en la lengua de llegada y estas soluciones responden a las propuestas que se hacen en la literatura. Sin embargo, se encontraron dificultades evidentes con el uso de acrónimos y siglas sin su forma desarrollada o una explicación, especialmente los que se refieren a nombres de instituciones u organizaciones regionales, nacionales o locales. Conclusiones: Los acrónimos y siglas no constituyen meramente formas lingüísticas, sino que se refieren a fenómenos objetivos de la cultura científica y constituyen referentes culturales. Por lo que su uso y su traducción implican consideraciones lingüísticas y extralingüísticas que demandan del traductor el uso de medios auxiliares y fuentes de referencia, incluida la consulta a especialistas, para producir un texto caracterizado por su precisión y calidad, y que garantice el cumplimiento de su función comunicativa fundamental, brindar información útil al personal de la salud.
Palabras clave: Acrónimo, Sigla, Traducción, Características Culturales


Abstract

Introduction and Objectives: Acronyms and initialisms are frequently used in medical texts. Their translation is not only language-dependent, but also culture-bound. The objective of this research was to analyze the problems associated to the translation from English into Spanish of acronyms and initialisms used in medical texts on Cardiology. Method: This is a qualitative, interpretive, descriptive, synchronic study based on the lexical analysis of acronyms and initialisms in the English source text (ST) and the Spanish target text (TT), within the framework of descriptive translation studies. An empirical textual sample of 8 medical articles on Cardiology was analyzed, as well as their corresponding translations into Spanish. Results: In the corpus 83 acronyms and initialisms were identified. Only 15 were identified as acronyms. When analyzing the acronyms and initialisms, it was found that, in most of the cases, suitable solutions were given to the translation problems posed by their use in the TT, and such solutions coincided with the ones proposed in the reviewed literature on the topic. Some difficulties were found, however; they were related to the use of acronyms and initialisms appearing in the ST without their full form or without an explanation, especially those referring to institutions and regional or national organizations. Conclusions: Acronyms and initialisms are not only linguistic forms, but they are also objective phenomena within scientific culture and they are cultural referents. That is why their use and translation imply linguistic as well as extra-linguistic considerations which demand from the translator the use of auxiliary sources and reference materials, including interviews to specialists, to achieve quality and precision in the translated text. This will guarantee the fulfillment of its main communicative function, that is, to provide useful information to health care-related staff.
Key words: Acronym, Initialism, Translation, Cultural Characteristics



Introducción

La traducción es un proceso que requiere inevitablemente de dos lenguas y dos culturas. Esto implica que los traductores enfrenten permanentemente el problema de cómo dar solución a la presencia de elementos culturales en los textos originales, y de encontrar procedimientos de traducción adecuados para dar soluciones satisfactorias de traducción en la lengua de llegada1.
En cualquier tipo de texto es común la presencia de elementos culturales, incluso en los textos especializados, como es el caso de los textos médicos. Un texto especializado es un producto del lenguaje que se utiliza con propósitos específicos. A menudo es un medio de investigación, instrucción, aclaración o difusión de la información2.
Puesto que un referente cultural es un tipo de expresión para referirse a un elemento o fenómeno en una comunidad en particular, y se considera como un rasgo distintivo de esa comunidad, los referentes culturales en los textos médicos pueden aparecer en diferentes formas3,4. Martínez4 plantea que los referentes culturales en textos especializados, incluidos los textos médicos, pueden aparecer como metáforas, latinismos, espanglish, tratamiento de marcas comerciales, variaciones lingüísticas, combinación de términos y palabras no técnicas, y también abreviaturas, tales como acrónimos y siglas.
Así, los acrónimos y siglas se consideran como referentes culturales en los textos médicos, porque se utilizan para hacer referencia a una gran variedad de conceptos y fenómenos médicos, que incluyen nombres de enfermedades, compuestos químicos, organizaciones, lugares geográficos, procedimientos, terapias, entre otros.
La medicina es un campo en acelerado desarrollo técnico y científico que cada año incorpora nuevos términos al léxico médico, entre ellos abreviaturas. En sentido general, Pérez Peña5 plantea que existe un creciente y alarmante deterioro del lenguaje médico pues los especialistas las utilizan exageradamente y, a menudo, su uso obstaculiza la comunicación en este campo del conocimiento.
La Cardiología es una rama de la medicina que se caracteriza por el amplio uso de acrónimos y siglas, y su uso erróneo e indiscriminado está presente, en muchas ocasiones, como resultado de traducciones inadecuadas o de su uso indiscriminado por parte de los especialistas.
Para los traductores de textos médicos el uso de acrónimos y siglas constituye un problema, ya que son muy utilizados para referirse a diversos fenómenos médicos específicos, que van desde nombres de enfermedades hasta organizaciones relacionadas con la salud, es decir, constituyen referentes culturales en los textos médicos. A menudo para los traductores profesionales y los estudiantes de traducción se hace difícil lidiar con ellos, principalmente porque encontrar la mejor solución no depende solamente de factores lingüísticos, sino también de factores extralingüísticos y culturales.
Los principales problemas de traducción asociados al uso de acrónimos y siglas, identificados por Pakhomov6, Benavent e Iscla7 y Giraldo8, están relacionados con la ambigüedad que ocasiona su uso sin clarificaciones, la falta de equivalentes en la lengua de llegada y el uso de un acrónimo o sigla tal y como aparece en la lengua de partida, es decir, en forma de préstamo. Otros problemas están asociados al hecho de que cuando se traduce del inglés al español algunos acrónimos y siglas cambian porque existe un equivalente normalizado o comúnmente aceptado en la lengua de llegada, el uso inadecuado de preposiciones en la lengua de llegada y el uso de nombres de instituciones y organizaciones nacionales. Además, también pueden surgir problemas asociados al uso de los géneros gramaticales, el uso de las marcas de plural, el uso de acrónimos y siglas en inglés que representan grupos nominales con modificación múltiple, la falta de derivación etimológica o la existencia de más de un significado.
El estudio de fenómenos como estos es importante en la traducción médica porque, como plantea López Espinosa9, el traductor médico tiene una responsabilidad profesional y humana: la traducción de textos médicos de una lengua a otra no solo significa brindar información a los profesionales de la salud, el contenido de estos textos puede representar también "la promoción, conservación y desarrollo de la salud y, en muchos casos, la salvación, recuperación y prolongación de una vida".
Sin embargo, a pesar de su amplio uso, encontramos que la bibliografía sobre el tema es escasa, así como las investigaciones, especialmente cuando consideramos el uso de abreviaturas, en la forma de acrónimos y siglas, como referentes culturales en textos médicos en nuestro país, a pesar de su uso generalizado.
Por lo tanto, teniendo en cuenta todo lo anterior y asumiendo que la traducción de acrónimos y siglas no depende solamente de la lengua sino también de elementos culturales, y que su traducción inadecuada puede ocasionar problemas de comprensión o malentendidos entre los especialistas de la medicina, el objetivo de esta investigación es analizar los problemas de traducción asociados a la traducción al español de acrónimos y siglas usados en textos médicos en inglés de Cardiología.


Método


Pacientes y escenario
Esta investigación es sincrónica, descriptiva, interpretativa y cualitativa, y se basa en el análisis léxico de acrónimos y siglas, tanto en la lengua de partida (inglés) como en la de llegada (español), en el marco de los estudios descriptivos de traducción.
Para la realización de la investigación se utilizó una muestra textual empírica compuesta por 8 textos médicos sobre Cardiología y los textos traducidos correspondientes. La lengua de partida es el inglés y la de llegada el español.
Los textos seleccionados son artículos publicados entre 1996 y 2006 en las siguientes publicaciones médicas: Bioorganic and Medicinal Chemistry, Annals of Thoracic Surgery, American Heart Journal, Neurology, Boletín Asociación Médica de Puerto Rico, JAMA (Journal of American Medical Association) e Iranian Journal of Medical Sciences and Epidemiology.
Los textos en la lengua de llegada fueron producidos por traductores del Departamento de Traducción de la Universidad Médica "Serafín Ruiz de Zárate Ruiz" (Santa Clara, Cuba). Estas traducciones son utilizadas como materiales de referencia por médicos, enfermeras, estudiantes de medicina y enfermería, así como otros especialistas de la salud.
Primeramente se identificaron los acrónimos y siglas en los textos en la lengua de partida. Para ello se partió del criterio que las abreviaturas, o reducciones léxicas, son aquellas unidades léxicas formadas por la letra inicial o cualquier otra letra de un grupo de palabras. Según Kasprowicz10, una reducción léxica es la forma reducida de una palabra o una frase, deletreada de acuerdo con las reglas de cada lengua en particular.
Existen diferentes tipos de abreviaturas. Ellas pueden aparecer como acortamientos, fusiones, acrónimos y siglas. En esta investigación se investigarán únicamente acrónimos y siglas. Luego de identificados se analizaron los textos en la lengua de llegada para determinar cómo los traductores resolvieron este problema de traducción y, finalmente, se arribó a conclusiones acerca del uso adecuado o inadecuado de las siglas y acrónimos por parte de los traductores.
Esta investigación se realizó en el marco de los estudios descriptivos de traducción, que refieren cómo se realiza la traducción, con un enfoque funcional y orientado al objetivo, lo que significa que el texto traducido es aceptable siempre y cuando cumpla su función en la cultura de llegada.
Otra característica de los estudios descriptivos de traducción es que se requiere de un tertium comparationis, que sirve como base para la comparación y posterior descripción del texto de partida y el de llegada. En este caso, se trata de acrónimos y siglas utilizadas en artículos médicos, considerados como referentes culturales, pues su uso no solo depende de la lengua, sino también de la cultura.
Los acrónimos y siglas objeto de estudios se extrajeron de los textos en la lengua de partida y en la lengua de llegada, y se agruparon según los criterios de la terminología clínica SNOMED11,12, lo que permitió establecer su función pragmática. Luego estos fueron analizados y clasificados en cuanto a categoría y función gramatical, y la correspondencia entre ellos y su forma desarrollada. También se tuvo en cuenta el género y el número. En cuanto a la sintaxis, se determinó si los acrónimos y siglas presentan correspondencia total, parcial y nula con respecto a su forma desarrollada.
Otro tipo de análisis tuvo en cuenta la presencia o ausencia del equivalente o explicación del acrónimo o sigla, y si se combinaban números y letras en su formación. Finalmente, se realizó un análisis de los problemas que representan para los traductores y se propusieron posibles soluciones.


Resultados

Para la identificación de siglas y acrónimos se partió del criterio de Kasprowicz10 y Crystal13, que consideran que los términos "acrónimo" y "sigla" describen unidades léxicas formadas por una o varias letras iniciales mayúsculas. La diferencia radica en que los acrónimos se pronuncian como una palabra y forman una nueva unidad léxica, mientras que las siglas se articulan como letras separadas.
En el corpus se identificaron 83 acrónimos y siglas, del total, solo 15 fueron identificados como acrónimos.
Al analizar estos acrónimos y siglas, según la terminología médica SNOMED, el comportamiento fue el siguiente (Tabla).

Tabla 1. Clasificación de los acrónimos y siglas según SNOMED

Tabla 1


No se encontraron casos representativos de los siguientes campos: Hallazgos clínicos (signos y síntomas), Organismos vivos (bacterias, virus, animales, plantas), Especímenes y Eventos (eventos adversos, accidentes).
Los acrónimos y siglas también se clasificaron en propios y mixtos, según la propuesta de Giraldo8. Las abreviaturas propias son aquellas en cuya composición se utilizan exclusivamente las letras iniciales de las unidades léxicas de estructura sintagmática. En esta investigación se detectaron 43 siglas y 13 acrónimos propios, entre ellos, TIA: transient ischemic attacks y TIMI: Thrombolysis In Myocardial Infarction. En cambio, las abreviaturas mixtas, son aquellas que han utilizado caracteres secundarios (letras que no son iniciales de la unidad léxica, cifras, símbolos) u omitido partes fundamentales de la forma desarrollada. En la muestra seleccionada se encontraron 23 siglas mixtas y 3 acrónimos mixtos, por ejemplo, MPO: myeloperoxidase y NSAIDs: nonsteroidal anti-inflammatory drugs. Una pequeña parte de las siglas y acrónimos mixtos estaba representada por símbolos químicos, donde se combinan letras y números.
En la muestra analizada todos los acrónimos y siglas fueron clasificados como sustantivos; sin embargo, al analizar su función gramatical, del total de 83 siglas y acrónimos, 19 cumplían función adjetiva en el texto en inglés, por ejemplo, AD effect y GUSTO III study. El resto de las siglas y acrónimos cumplían una función sustantiva.
En el caso de los textos en la lengua de partida, es decir, escritos en inglés, no fue posible determinar marcas de género en las siglas y acrónimos identificados. En cuanto a las marcas de plural, en inglés por lo general simplemente se adiciona una "–s" a la sigla o acrónimo para formar el plural. En la muestra solo se detectaron cuatro casos de adición del sufijo a la sigla o acrónimo, por ejemplo, EEGs; sin embargo, es preciso señalar que se identificaron algunos casos donde no se utiliza la marca de plural, pero es posible detectar que se trata de sustantivos en plural porque la sigla o acrónimo aparece junto a su forma desarrollada, por ejemplo, LDL (low density lipoproteins).
Desde el punto de vista sintáctico se analizó el tipo de correspondencia entre las siglas y acrónimos y sus formas desarrolladas; para ello se tuvo en cuenta la propuesta de Giraldo8, quien distingue correspondencia total (cuando la letra inicial de cada uno de los elementos de la forma desarrollada está presente en la sigla o acrónimo), parcial (cuando falta una letra inicial o sílaba de alguno de los elementos de la forma desarrollada) y nula (ninguna de las letras o sílabas iniciales de la forma desarrollada está alineada con los constituyentes de la sigla o acrónimo). En la muestra, se determinó que en 54 casos se trataba de correspondencia total; 25, de correspondencia parcial y 4, de correspondencia nula.
Durante el análisis también se detectó que muchos autores utilizan siglas y acrónimos y en ningún momento utilizan su forma desarrollada, aunque se recomienda que toda vez que se utilice una sigla o acrónimo, incluso entre especialistas de una rama determinada, la primera vez que sean utilizadas en el texto deben ir acompañadas de su forma desarrollada para facilitar la comprensión y evitar cualquier tipo de malentendido.


Discusión

En los textos traducidos muchos de los problemas de traducción detectados estaban asociados a los fenómenos descritos en la sección precedente. La identificación de los problemas de traducción se basó en las propuestas de Pakhomov6 y Benavent e Iscla7.
El primer problema detectado fue la ausencia en el texto en la lengua de partida de la forma desarrollada de la sigla o acrónimo. Puesto que muchas veces el traductor no es especialista en medicina, puede ocurrir que desconozca lo que significa la sigla y el resultado puede ser que simplemente mantenga la sigla en inglés, que utilice un equivalente no normalizado o que utilice su equivalente normalizado en español, pero no incluya su forma desarrollada, que es lo recomendable, tanto para el autor original, como para quien traduce. Por ejemplo:

  • PDA subjects included 2 premature infants.

  • Los sujetos con Ductus Arteriosus Permeable (DAP) incluyeron 2 niños.



En el ejemplo el traductor incluye la forma desarrollada de la sigla, para asegurar una mejor comprensión del texto.
El segundo problema detectado es que los acrónimos y siglas mantienen en español la misma forma que en inglés, pues constituyen préstamos de esta lengua. Por ejemplo:

  • The ORAC values for pindolol and propranolol were 0.62 respectively.

  • Los valores ORAC para el pindolol y el propranolol fueron 0,62, respectivamente.



En este caso, las siglas en inglés se mantienen en español, pero es recomendable, no solo incluir su forma desarrollada si se utiliza por primera vez, sino también aclarar que las siglas corresponden a la forma inglesa. En este caso, la oración en español debió ser como sigue: "Los valores ORAC (Capacidad de Absorción de Radicales de Oxígeno, por sus siglas en inglés) para el pindolol y el propranolol fueron 0,62, respectivamente."
El tercer problema surge cuando existe un equivalente normalizado en español, que es diferente a la sigla o acrónimo en inglés. Como en los casos anteriores, el traductor debe hacer una búsqueda exhaustiva en los medios auxiliares (diccionarios, glosarios, bases de datos, libros sobre la especialidad, entre otros) a su alcance, e incluso consultar especialistas, para encontrar el equivalente aceptado o normalizado en la lengua de llegada. Por ejemplo, en el caso que se muestra a continuación, el traductor mantiene la sigla en inglés (MI); sin embargo, es conocido que en español existe un equivalente normalizado (IM), que debió utilizar en este caso.

  • Background Prompt restoration…improves survival in patients with acute myocardial infarction (MI).

  • Una rápida restauración…aumenta la supervivencia en pacientes con infarto de miocardio (MI).



Cuando las siglas y acrónimos se refieren a nombres de instituciones, grupos u organizaciones nacionales o lugares, también pueden surgir problemas, pues no solo se trata de resolver un problema lingüístico, sino también cultural. El traductor debe ser capaz de transmitir información que le permita al lector comprender plenamente el texto que está leyendo. Por ejemplo:

  • It may be more difficult to detect an association that actually exists, particularly in an insured HMO population..

  • Puede ser más difícil detectar una asociación que realmente existe, particularmente en una población HMO asegurada.



En este caso en particular la solución dada por el traductor es incompleta y poco satisfactoria. No incluye el equivalente o la forma desarrollada de la sigla, y no se transmite la idea del texto en inglés. Incluso para los especialistas puede resultar difícil identificar qué significa la sigla HMO. Una vez más, el uso de fuentes de referencia y medios auxiliares es crucial para ofrecer una solución que cumpla su objetivo comunicativo. En este caso se trata de una institución que se inserta en el contexto del sistema de atención médica de los Estados Unidos, por lo tanto, dado que se trata de un contexto muy específico, es recomendable no solo que se incluya su forma desarrollada o su equivalente en español, si lo tuviera, sino también una breve explicación en español, como en "Puede ser más difícil detectar una asociación que realmente existe, particularmente en una población asegurada por la HMO (Health Managament Organization, una organización estadounidense que brinda atención médica mediante pagos mensuales)".
Otro problema de traducción fue evidente cuando en la forma desarrollada de las siglas en inglés aparecen sustantivos como modificadores de otros sustantivos en función adjetiva, o varios modificadores del núcleo de la frase nominal, que no es una estructura sintáctica común en español. En estos casos es necesario que el traductor reconozca la relación entre los diferentes elementos que forman la frase nominal que constituye la forma desarrollada de la sigla o acrónimo, esto requiere no solo de conocimiento lingüístico, sino también cultural, pues se trata de encontrar la relación entre los elementos desde el punto de vista pragmático. El siguiente ejemplo ilustra el problema:

  • Scavenging activities of pindolol may contribute for enhancing and/or accelerating selective serotonine specific reuptake inhibitors (SSRI)..

  • Las actividades de depuración del pindolol pudieran contribuir a incrementar los inhibidores específicos en la reabsorción de la serotonina selectiva (IERSS).



En este caso, el traductor fue capaz de encontrar la relación entre los diferentes modificadores y el núcleo de la frase, a pesar de que no existen elementos conectores entre ellos, para ello utilizó en español varias preposiciones en su forma desarrollada.
Las marcas de género también constituyen un problema cuando se traduce del inglés al español, puesto que muchas veces en inglés el género no es una categoría gramatical, sino más bien pragmática y se asigna sobre la base del género natural, por lo que los adjetivos, por ejemplo, no tienen marcas de género, y muchos sustantivos tampoco. De ahí, que lo que generalmente se señala como factor determinante del género es el nombre principal equivalente en español, como se puede ver en los siguientes casos, en los que el traductor resuelve satisfactoriamente este problema.

  • The confidence intervals (CI) for chest pain associated with migraine were calculated from the ratio of proportions..

  • Los intervalos de confianza (IC) para el dolor precordial asociado con migraña fueron calculados de la relación entre las proporciones.

  • Many of these problems have been attributed to cardiopulmonary by-pass (CPB)….

  • Muchos de estos problemas han sido atribuidos a la derivación cardiopulmonar (DCP)…



Otro problema que el traductor debe enfrentar cuando trabaja con siglas y acrónimos es el uso de formas en plural. Si bien en inglés se acepta la ausencia o presencia de la marca de plural (–s), en español no ocurre así, pues las siglas y acrónimos generalmente no aceptan el morfema –s, y si el número de la sigla no queda explícito a través del contexto, se indica mediante el uso de los artículos en plural o singular, y en algunos casos mediante la reduplicación (EE.UU.). Por ejemplo, en el caso que se muestra a continuación el traductor no fue capaz de dar una solución satisfactoria, no solo agrega una marca de plural, si no que no utiliza el artículo:

  • In the lab randomized controlled trials (RCTs) have critically analyzed….

  • En el laboratorio RCTs han analizado rigurosamente…



Debió decir: "En el laboratorio, los ensayos clínicos aleatorizados (RCT, por sus siglas en inglés) han analizado rigurosamente…" Al analizar el total de casos identificados de siglas y acrónimos, se pudo determinar que, en la mayoría de los casos se dieron soluciones satisfactorias a las problemas de traducción impuestos por el uso de siglas y acrónimos en los textos en la lengua de llegada, y estas soluciones responden a las propuestas que se hacen en la literatura6,10,14,15. Sin embargo, se encontraron dificultades evidentes con el uso de acrónimos y siglas sin su forma desarrollada o una explicación, especialmente los que se refieren a nombres de instituciones u organizaciones regionales, nacionales o locales.


Conclusiones

Es importante considerar, tanto por parte de los autores como de los traductores, que los acrónimos y siglas no constituyen meramente formas lingüísticas, sino que se refieren a fenómenos objetivos de la cultura científica y constituyen referentes culturales. Por lo que su uso y su traducción implica consideraciones lingüísticas y extralingüísticas que demandan del traductor el uso de medios auxiliares y fuentes de referencia, incluida la consulta a especialistas, para producir un texto caracterizado por su precisión y calidad y que garantice el cumplimiento de su función comunicativa fundamental, brindar información útil al personal de la salud.


Referencias bibliográficas

  1. James K. Cultural implications for translation. Translation Journal [Internet] 2002 [citado 11 Oct 2010];6(4):[aprox. 4 p]. Disponible en: http://www.bokorlang.com/journal/22delight.htm

  2. Grygoruk A. Functional approach to translating specialized texts. YLMP [Internet]. 2009 [citado 11 Oct 2010]. Disponible en: http://ylmp.pl/ylmp2009/ABSTRACTS/YLMP2009_abstract_Grygoruk.pdf

  3. Betancourt B, Treto L. Analysis of the use of acronyms and initialisms as cultural referents in medical texts [tesis]. Santa Clara: Central University "Marta Abreu" of Las Villas; 2011.

  4. Martínez A. Limitaciones y condicionantes de la práctica profesional de la traducción médica: aplicaciones a la combinación lingüística inglés-español. Actas del IV Congreso "El español, lengua de traducción para la cooperación y el diálogo"; 8-10 Mayo 2008. Madrid: ESLEtRA; 2010.

  5. Pérez G. Algunas consideraciones sobre la traducción de los textos médicos. ACIMED [Internet]. 2005 [citado 11 Oct 2010];13(4):[aprox. 3 p.]. Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1024-94352005000400008

  6. Pakhomov S. Semi-Supervised maximum entropy based approach to acronym and abbreviation normalization in medical texts. Proceedings of the 40th Annual Meeting of the Association for Computational Linguistics (ACL), Philadelphia, July 2002.

  7. Benavent A, Iscla R. Vicios del lenguaje médico y defectos de estilo en la escritura científico-médica (II). Piel. 2003;18(1):11-6.

  8. Giraldo J. Análisis y descripción de las siglas en el discurso especializado de genoma humano y medio ambiente [tesis]. Institut Universitari de Linguística Aplicada: Universitat Pompeu Fabra; 2008.

  9. López Espinosa JA. Fidelidad de las traducciones de textos científico-médicos. ACIMED [Internet]. 1995 [citado 11 Oct 2010];3(2):[aprox. 5 p.]. Disponible en: http://bvs.sld.cu/revistas/aci/vol3_2_95/aci05295.htm

  10. Kasprowicz M. Handling Abbreviations and Acronyms in Medical Translation. Translation Journal [Internet]. 2010 [citado 3 Ene 2011];14(2):[aprox. 4 p.]. Disponible en: http://translationjournal.net/journal/52abbreviations.htm

  11. Reynoso G, Martin-Jacod E, Berra MC, Burlak O, Houghton P, Vallese MC. SNOMED: la nomenclatura sistematizada de medicina del College of American Pathologists. Panace@ [Internet]. 2003 [citado 3 Ene 2011];IV;(13-14):291-92.

  12. SNOMED Clinical Terms® User Guide. July 2009 International Release [Internet]. 2009 [citado 4 Sep 2012]. Disponible en: https://utslogin.nlm.nih.gov/cas/login?service=http%3a%2f%2fdownload.nlm.nih.gov%2fumls%2fkss%2fIHTSDO20090731%2fSNOMED_CT_Essential_20090731.zip

  13. Crystal D. The cambridge encyclopedia of the english language. Cambridge: Press Syndicate of the University of Cambridge; 1995.

  14. Calvo Basarán J. Abbreviations and acronyms translation. PuntoyComa [Internet]. 1992 [citado 11 Oct 2010];(5). Disponible en: http://ec.europa.eu/translation/bulletins/puntoycoma/05/pyc051.htm

  15. Belda Medina JR. Translating computer abbreviations from english into spanish: Main types and problems. META [Internet]. 2004 [citado 11 Oct 2010];49(4):920-9. Disponible en: http://www.erudit.org/documentation/eruditPolitiqueUtilisation.pdf


Recibido: 30 de septiembre de 2012
Aceptado: 12 de noviembre de 2012