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CorSalud 2012;4(2)

 

 

ARTICULO ORIGINAL

 

 

FACTORES CLÍNICOS Y DEL PROCEDIMIENTO RELACIONADOS CON LA TROMBOSIS DE STENT

 

 

Por:

 

Dr. Guillermo Pacheco González1, Dr.C. Ángel G. Obregón Santos2, Dr. Ronald Aroche Aportela3, Dr.C. Héctor Conde Cerdeira4, Dr. Myder Hernández Navas5 y Dr. Julio C. Gandarilla Sarmientos6

______________

1.     Especialista de I Grado en Cardiología y MGI. Hospital Militar Central “Dr. Luis Díaz Soto”. La Habana, Cuba. Correo electrónico: guillepa@infomed.sld.cu

2.     Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de II Grado en Cardiología. Centro de Investigaciones Médico-Quirúrgicas. La Habana, Cuba.

3.     Especialista de II Grado en Cardiología y de I Grado en MGI. Centro de Investigaciones Médico-Quirúrgicas. La Habana, Cuba.

4.     Doctor en Ciencias Médicas. Especialista II Grado en Cardiología. Centro de Investigaciones Médico-Quirúrgicas. La Habana, Cuba.

5.     Especialista de I Grado en Cardiología y MGI. Hospital General Docente “Enrique Cabrera”. La Habana, Cuba.

6.     Especialista de I Grado en Cardiología y MGI. Instituto de Cardiología y Cirugía Cardiovascular. La Habana, Cuba.

 

 

 

Resumen

 

Introducción y objetivos: La trombosis del stent es una de las complicaciones posterior al intervencionismo coronario percutáneo, asociada a una elevada mortalidad y morbilidad. A pesar del uso de la doble terapia antiplaquetaria (aspirina y clopidogrel) y la optimización de la técnica, su incidencia no ha desaparecido. El objetivo de esta investigación fue determinar los factores de riesgo de trombosis de los stent metálicos convencionales. Método: Se realizó un estudio descriptivo-retrospectivo. De las 2.014 arterias revascularizadas en el Centro de Investigaciones Médico-Quirúrgicas de La Habana, Cuba; entre agosto de 1997 y febrero de 2009, se seleccionaron las 289 reestudiadas. Resultados: La trombosis de los stent metálicos convencionales estuvo presente en 20 arterias, de las cuales 11 resultaron ser la descendente anterior, y su mayor incidencia se presentó en las primeras 24 horas y después de los 30 días. La diabetes mellitus se comportó como un factor de riesgo de trombosis (OR* = 3,06), así como la presión de liberación de menos de 10 atmósferas (OR = 3,70) y las lesiones complejas de los tipos B2 y C (OR = 8,80), todos con significación estadística (p < 0,05). Conclusiones: La mayor incidencia de trombosis de los stent metálicos convencionales fue en el primer día de la revascularización, después de la terminación de la doble terapia de antiagregación plaquetaria y en la arteria descendente anterior. La diabetes mellitus, las lesiones complejas y las bajas presiones de liberación del stent, se comportaron como factores de riesgo de trombosis con resultados estadísticamente significativos.

 

 

Abstract

Introduction and Objectives: Stent thrombosis is a complication after percutaneous coronary intervention associated with high mortality and morbidity. Despite the use of dual antiplatelet therapy (aspirin and clopidogrel) and optimization of the technique, its incidence has not disappeared. The objective of this research was to determine the risk factors for thrombosis of the bare metal stents. Method: A retrospective descriptive study was performed. Out of the 2,014 revascularized arteries at the Medical-Surgical Research Center in Havana, Cuba, between August 1997 and February 2009, the 289 redo ones were selected. Results: thrombosis of the conventional metal stents was present in 20 arteries, of which 11 corresponded to the anterior descending artery, and the highest incidence occurred in the first 24 hours and after 30 days. Diabetes mellitus was a risk factor for thrombosis (OR = 3.06) and the release pressure of less than 10 atmospheres (OR = 3.70) and complex lesions of types B2 and C (OR = 8.80), all with statistical significance (p <0.05). Conclusions: The highest incidence of bare metal stent thrombosis was on the first day of revascularization after the termination of dual antiplatelet therapy and located in the anterior descending artery. Diabetes mellitus, complex lesions and low pressures of stent release, behaved as risk factors for thrombosis with statistically significant results.

 

Palabras clave:

ENFERMEDAD CORONARIA

ANGIOPLASTIA

PRÓTESIS VASCULAR

TROMBOSIS

FACTORES DE RIESGO

Key words:

CORONARY DISEASE

ANGIOPLASTY

BLOOD VESSEL PROSTHESIS

THROMBOSIS

RISK FACTORS

 

Nota del Editor: *OR (odds ratio): razón de probabilidades o posibilidades, índice de probabilidades, cociente de probabilidades. Hay quien plantea con frecuencia la conveniencia de no traducir este término y aceptar directamente el anglicismo odds ratio (OR).

 

 

Introducción

 

Cuando se comenzaron a implantar los primeros stents (inicialmente el Gianturco-Roubin y el Palmaz-Schatz), que hoy día llamamos convencionales (BMS, por sus siglas en inglés), las indicaciones de su uso fueron fundamentalmente de tipo anatómico y, por tanto, muy limitadas. Estas endoprótesis coronarias lograron incrementar la seguridad de los procedimientos intervencionistas, como lo demuestra el hecho de que con su uso se redujeron a 1 - 2 % las tasas de oclusión aguda, que acontecían hasta en el 12 % de los casos; esta práctica se asoció a la administración sistemática de los regímenes antiplaquetarios dobles. Esto hizo que se superase la fase restrictiva de indicación clínica, en la que los stents sólo se implantaban en casos de oclusión o amenaza de oclusión de la arteria tratada1.

La trombosis del stent (TS) es una de las complicaciones que ocurren posterior al intervencionismo coronario percutáneo (ICP) y se asocian a una elevada morbilidad y mortalidad. A pesar del uso de la doble terapia antiplaquetaria (aspirina y clopidogrel) y de la optimización de la técnica, su incidencia no ha desaparecido. Estos son nuevos problemas que surgen tras haber introducido técnicas nuevas que aportan grandes beneficios. No es poner de manifiesto el problema sino conocer sus causas y lograr soluciones para abolir, o al menos minimizar, sus efectos negativos.

El objetivo de esta investigación fue determinar los factores de riesgo de trombosis de los stent metálicos convencionales.

 

 

Método

 

Se realizó un estudio descriptivo-longitudinal-retrospectivo en pacientes intervenidos en el laboratorio de hemodinámica del Cardiocentro del Centro de Investigaciones Médico-Quirúrgicas (CIMEQ) de La Habana, Cuba, entre agosto de 1997 y febrero de 2009. De las 2.014 arterias revascularizadas, en 1.464 pacientes, se seleccionaron las 289 reestudiadas. Se excluyeron aquellos en los que no se puedo recoger los datos necesarios para dar cumplimiento a los objetivos por cualquier causa.

La información se obtuvo a partir de la historia clínica, los informes de los procedimientos intervencionistas y la base de datos en el programa ANGYCOR, donde se registra de forma continua la actividad de cardiología intervencionista en formato digital y convencional. En los casos en que fue necesario se acudió a la grabación del procedimiento en el disco compacto, que permanece en el archivo de este laboratorio, para la aclaración de alguna información. Los datos obtenidos se registraron en una base de datos creada al efecto con el programa SPSS versión 15.0, con el cual se analizó posteriormente la información.

 

 

Resultados

 

La trombosis de los BMS estuvo presente en 20 arterias, de las cuales 11 resultaron ser la descendente anterior (DA).

En nuestro estudio la trombosis tuvo la mayor incidencia en dos momentos muy importantes con relación a la doble terapia antiagregante plaquetaria: al inicio y al final del tratamiento. En las primeras 24 horas posteriores al procedimiento, la trombosis tuvo una incidencia de seis casos; sin embargo, esta disminuye a partir del octavo día para volver a incrementarse a partir de los 30 días, momento en que se suspende el clopidogrel (Gráfico 1).

 

Gráfico 1. Presentación de la trombosis según los días posteriores al intervencionismo.

 

Al analizar las características clínicas basales de los pacientes de nuestra serie en relación con la trombosis, se pudo determinar que la diabetes mellitus se comportó como un factor de riesgo importante (OR = 3,06), y resultó estadísticamente significativo, lo cual no ocurrió con el resto de las variables estudiadas (Tabla 1).

 

Tabla 1. Características clínicas y riesgo de trombosis.

 


Características

Trombosis n(%)

OR

Intervalo

Confianza

p

Masculino

15 (1,3%)

0,68

0,24-1,88

0,454

Hipertensión

10 (1,4%)

1,14

0,47-2,76

0,767

Diabetes mellitus

6 (3,2%)

3,06

1,16-8,07

0,017*

Tabaquismo

11 (1,4%)

1,11

0,46-6,69

0,824

Dislipidemia

6 (1,7%)

1,39

0,53-3,62

0,502

Infarto previo

12 (2,1%)

1,06

0,38-2,62

0,350

Multiarteriales

7 (2,1%)

1,85

0,73-4,68

0,187

*Estadísticamente significativo

Fuente: Ficha de recolección de datos.

 

El estudio de las características angiográficas y del procedimiento, en relación con la trombosis, nos permite determinar como factores de riesgo de esta complicación, la impactación del stent a bajas presiones (menos de 10 atmósferas) y las lesiones complejas de los tipo B2 y C, con OR=3,7 y OR = 8,8; respectivamente (Tabla 2).

 

Tabla 2. Características angiográficas y del procedimiento, y riesgo de  trombosis.

 


Características

Trombosis n(%)

OR

Intervalo

Confianza

p

Arteria <  3 mm

12(1,3%)

1,97

0,80-4,85

0,131

Stent > 18mm

18(1,1%)

1,75

0,40-7,59

0,447

Oclusión total

2(0,7%)

0,62

0,15-2,82

0,562

DLM < 1mm

15(1,1%)

1,52

0,55-4,20

0,415

< 10 atmósferas

9(2,4%)

3,70

1,52-9,00

0,002*

Lesiones  B2 y C

19(1,4%)

8,8

1,17-65,85

0,010*

Lesión en CD

5(1,1%)

1,09

0,39-3,01

0,872

Lesión en DA

11(1,3%)

1,74

0,72-4,22

0,213

Lesión en CX

4(1,7%)

1.86

0,62-5,62

0,262

*Estadísticamente significativo

Fuente: Ficha de recolección de datos.

 

 

Discusión

 

La trombosis de stent depende de cuatro grupos de factores: relacionados con el stent, el paciente, la lesión y con el procedimiento1-4.

En este estudio la casuística de TS fue en los stents metálicos convencionales, pues son estos los más utilizados. No hubo ningún caso de trombosis de stents liberadores de fármacos (SLF).

En septiembre de 2006 la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA, por sus siglas en inglés) se vio obligada a realizar una declaración sobre la seguridad de los SLF, en respuesta a la creciente preocupación sobre la posibilidad de un aumento de la mortalidad, debido a la trombosis tardía del stent (TTS)5, fundamentalmente basado en los estudios BASKET-LATE6 y el metaanálisis de Camenzind7, el primero con un seguimiento de 18 meses y el segundo de 3 años, donde se pudo observar un aumento significativo de los infartos de miocardio fatales y no fatales en el grupo de los SLF5. La publicación de Camenzind y colaboradores informó mayores efectos adversos con el sirolimus7.

La TTS es definida como un síndrome coronario agudo con evidencia angiográfica o patológica de presencia de trombo u oclusión en la arteria tratada, que ocurre después del mes de realizado el ICP8.

Otros estudios no demostraron un aumento significativo de los sucesos cardiovasculares mayores asociado a TTS, lo que hace a este tema controversial. Análisis recientes,  sugieren un incremento del riesgo de trombosis del 0,5 % con los SLF9-10.

La fisiopatología de la TTS es atribuible a distintos factores: a) la demora en la cicatrización arterial, caracterizada por deposición persistente de fibrina y endotelización incompleta alrededor de las celdas del stent, que puede observarse hasta cuatro años después del procedimiento11-12; b) la mala aposición del stent, ya sea adquirida o aguda (por expansión subóptima)13; y c) el cese de la doble terapia antiplaquetaria, que es considerado un factor de riesgo mayor observado en distintos estudios, por lo que el tiempo de antiagregación propuesto por la FDA, para los SLF, es como mínimo de 12 meses12-14.

En la declaración de la FDA5 se reafirma la eficacia y seguridad de los SLF bajo las indicaciones aprobadas por este comité. Las indicaciones no establecidas o definidas, son consideradas como riesgo para reestenosis y TTS15.

En las características relacionadas con el paciente se reconocen como factores de riesgo: la edad avanzada, la diabetes mellitus, la implantación del stent en el curso de un síndrome coronario agudo, la presencia de una fracción de eyección baja y el abandono de la doble terapia antiagregante.

En este estudio, la utilización de stents metálicos en  los pacientes con diabetes mellitus aumentó el riesgo de trombosis. Según la literatura consultada y los últimos estudios publicados, se recomienda el uso de los SLF en este grupo de pacientes diabéticos16.

La trombosis del BMS es más frecuente que ocurra durante el primer mes posterior al intervencionismo. En esta serie se comportó de igual manera, donde se identificaron dos momentos de mayor incidencia (las primeras 24 horas y alrededor del día 30), relacionados con el inicio o la suspensión de la doble terapia antiagregante17-18.

Está demostrado que algunos pacientes, a pesar de cumplir un adecuado tratamiento farmacológico de doble antiagregación plaquetaria, manifiestan resistencia a la aspirina o al clopidogrel, y en la mayoría de los laboratorios no se realizan análisis de rutina para determinar previamente los pacientes con resistencia a la antiagregación19.

Determinadas características de las lesiones se comportan como factores de riesgo, como son las lesiones en bifurcación y las lesiones complejas, con lo cual coincidimos, pues esta serie demuestra que las lesiones de los tipos B2 y C elevan el riesgo en más de ocho veces con relación a las lesiones de tipo A.

Se plantea que existen aspectos técnicos que pueden favorecer al desarrollo de la trombosis del stent, por lo que se hace necesaria la optimización del procedimiento. Se debe prestar especial atención al lumen final pequeño, el flujo coronario lento persistente y la implantación de múltiples stents. En esta serie se pudo identificar que la impactación del stent a bajas presiones (< 10 atmósferas), eleva el riesgo de trombosis más de tres veces12,20.

Para lograr un mejor resultado en la prevención de la trombosis de stents se hace necesaria una adecuada optimización del procedimiento durante la angioplastia, por ello se debe de incluir, si fuera necesario, la utilización del ultrasonido intravascular posterior a la implantación del stent, así como la aplicación de la técnica de doble globo (kissing balloon, en inglés)20 en las bifurcaciones, y una minuciosa inspección posterior al procedimiento en busca de disecciones residuales.

 

 

Conclusiones

 

La mayor incidencia de trombosis de los stent metálicos convencionales fue en el primer día de la revascularización, después de la terminación de la doble terapia de antiagregación plaquetaria y en la arteria descendente anterior. La diabetes mellitus, las lesiones complejas y las bajas presiones de liberación del stent, se comportaron como factores de riesgo de trombosis con resultados estadísticamente significativos.

 

 

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Recibido: 12 de enero de 2012

Aceptado para su publicación: 27 de febrero de 2012