CorSalud 2010;2(1)
CARDIOCENTRO “ERNESTO CHE GUEVARA”
SANTA CLARA, VILLA CLARA
IMÁGENES EN CARDIOLOGÍA
ASISTOLIA PROLONGADA EN PACIENTE CON
MARCAPASOS PERMANENTE
Por:
Lic. Raimundo Carmona Puerta1, Dr. Gustavo Padrón
Peña2 y Dr. José M. Ercia Arenal3
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1.
Especialista
de I Grado en Fisiología Normal y Patológica. Servicio de Electrofisiología
Cardíaca. Cardiocentro "Ernesto Che Guevara". Santa Clara, Villa
Clara. Instructor. UCM-VC. e-mail: raimundo@cardiovc.sld.cu
2.
Especialista
de I Grado en Cardiología. Servicio de Electrofisiología Cardíaca. Cardiocentro
"Ernesto Che Guevara". Santa Clara, Villa Clara.
3.
Especialista
de I Grado en Cardiología. Hospital Universitario “Dr. Celestino Hernández Robau”.
Unidad de Cuidados Intensivos. Santa Clara, Villa Clara.
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Paciente de 62 años de edad con marcapasos permanente
implantado hace 23 años por el diagnóstico de bloqueo aurículo-ventricular
completo, con cambios periódicos del generador por agotamiento y uso continuado
de los mismos electrodos desde el primoimplante. Asistió a consulta de
programación de marcapasos por haber presentado síncope recurrente de aparición
súbita y recuperación rápida. Todos los parámetros del generador y los electrodos
mostraron valores normales, y el test
de captura en aurícula y ventrículo, resultó tener cifras menores de 1,0 V. Se
indicó una prueba de Holter y se constató un fallo de captura ventricular
intermitente con espiga, lo que dio origen a una asistolia prolongada de unos
20 segundos interrumpida por un latido de escape idioventricular, y posterior a
la reanudación del fallo de captura, se instaló nuevamente la estimulación
ventricular. En la figura se observan (panel superior izquierdo y derecho) los
modos DDD y VDD sin QRS electroestimulado, y en el panel inferior una imagen más
panorámica. Se descartó disfunción del electrodo (a veces intermitente) por la
presencia de espiga durante la falla. Por tanto, consideramos como causa más
probable de este trastorno, las elevaciones transitorias del umbral ventricular
a más del doble de los valores obtenidos en las consultas de seguimiento, ya
que posteriormente al diagnóstico se incrementó la amplitud de estimulación a
4,0 V y desapareció el síncope Esto demuestra que no puede constituir una norma
la programación de la amplitud de estimulación al doble del umbral, pues en
este caso, la amplitud ventricular estaba en 2,5 V cuando ocurría la pérdida de
conocimiento.